viernes, 31 de diciembre de 2010

Para un buen arranque de año

Hace un par de años plantee una serie de preguntas sumamente adecuadas para favorecer un cambio interior, algo que llamé en aquel momento "purificación" desde la perspectiva del término sánscrito: kir. Dada la pertinencia hoy de tal pequeña reflexión, la reciclo hoy aquí mismo:



Nuevo Año, oportunidad de limpieza y purificación. En sánscrito, el término kir o kri significa purificar y limpiar. Muy importante esta etimología para aprovechar precisamente este tiempo que está anunciado para depurar nuestra existencia a fin de retornar a lo meramente puro de nuestro ser. Lo dice Boff:
En sánscrito, crisis viene de kir o kri que significa purificar y limpiar. De kri viene también crítica que es un proceso por medio del cual nos damos cuenta de los presupuestos, de los contextos, del alcance y de los límites sea del pensamiento, sea de cualquier fenómeno. De kri se deriva además crisol, utensilio químico con el cual se limpia el oro de las gangas y, finalmente, acrisolar que quiere decir depurar y decantar. Entonces, la crisis representa la oportunidad de un proceso crítico, de depuración de lo esencial; sólo queda lo verdadero; lo accidental, sin sustentación, cae.
¿Seguiremos en nuestra dinámica de deseos insaciables que cada vez nos alejan más de nuestra más auténtica naturaleza al llenarnos de cosas sin sustancia? No es que esté mal "el desear", en sí ello es parte de la naturaleza de nuestra existencia y negarlo sería autodestructivo. Lo grave es que hemos perdido la comprensión de que nuestro deseo es hacia la trascendencia, ...pero nuestro sistema de vida nos ha llevado a limitar nuestra existencia en desear experiencia de pseudotrascendencia (seguir y adquirir todo lo que se nos vende como modo de vida a través de nuestro sistema socio-económico-político cada vez más mercantilizado). Es evidente que estamos inmersos en una profunda crisis y que el año que entra no muestra expectativas muy alentadoras para salir de la misma: ¿qué mejor momento para ajustarnos a la realidad que se nos presenta y tomarla para desprendernos de aquello de lo que nos hemos atiborrado y que, sin embargo, no forma parte esencial de nuestro ser? 

Las preguntas valiosas para este año, más allá de las clásicas guiadas por nuestros deseos del "tener" (material o estatus), podrán ser aquellas que nos cuestionen en lo más profundo: ¿quién soy? ¿de dónde vengo? ¿a dónde voy? Preguntas siempre complicadas y que se tornan incluso dolorosas cuando las confrontamos a nuestra realidad presente: ¿y qué estoy haciendo hoy para ser eso que soy? ó más trágicamente: ¿qué de lo que estoy haciendo me aleja cada vez más de mis anhelos más profundos? De ahí podemos pasar a otras muchas preguntas más para decantar mejor nuestra investigación: ¿qué es lo que me impele a seguir actuando igual? ¿qué cosas son aquellas que no quiero asumir y que me llevarían a acercarme a mi más profundo ser? ¿qué permito que suceda que me mantiene apresado en mi rutina? ¿a quienes debo enfrentar para salir de mis espacios de comodidad que me mantienen en un "dulce autoengaño"? ¿qué me impide ir a enfrentar esas conversaciones pendientes que evado? En fin ¿de qué me sigo atiborrando y que cada vez me lleva a una existencia más sin-sentido? 
Es momento de cuestionarnos profundamente, de limpiar, de decantar... lograr, en fin, acrisolar nuestra ser. Las crisis son grandes oportunidades para ello. Tenemos primeramente que hacerlo de manera individual, pero para que tenga un efecto de mayor potencia es socialmente como este ejercicio habría de llevarse a cabo también.


Y recalco hoy lo de socialmente, porque nuestra sociedad necesita en su colectividad también de purificación, sobre todo respecto a múltiples intereses mezquinos que la impulsan con constancia hacia esquemas fragmentadores cada vez más esclavizantes: es momento del Despertar generalizado de las consciencias.


Espero te sea de ayuda y aportes lo que desees en los comentarios.

jueves, 23 de diciembre de 2010

La Paz es distinta de la pasividad.

En tiempos de crisis por todos lados se predica la búsqueda de la "paz social", la unidad y la aversión a los conflictos. Anhelan los tiempos en que todo estaba en un estado de paz ya pasado, en el cual se lograron grandes avances de corte social y humanístico. Pero dicho estado de paz es una paz de otro momento, la presente crisis debe buscar otra paz, una paz distinta en la que las fuentes actuales del conflicto puedan ser integradas sabiamente.

De ahí que es importante notar que la paz es distinta a la pasividad. La pasividad es la que va desernegizando la existencia, matando la vida, a la pasividad social se le llega cuando se resuelven muchos problemas materiales y logra cierto "equilibrio" social,    ...pero es el "equilibrio de los cementerios" donde nada se mueve.

La vida sólo es plena cuando sus deseos profundos tienen derecho a manifestarse, y el deseo es movimiento, es creación. No siempre "buena" creación, pero sí siempre desafiante para las grandes almas.
La vida es un misterio, no queramos desentrañarlo. Sí busquemos darle estructura social acorde a principios, sobre todo en los niveles de autoridad. Principios surgidos de la interioridad profunda y no de reglas caducas (propias de los conservadores que quieren regresar al pasado).
Los grandes "santos" necesitaron de "grandes males" para manifestarse como tales. Un cierto nivel de "conflicto" siempre es deseable.
Sólo así podremos, como humanidad, generar obras de belleza trascendental.
Hay quienes con razón dicen: "La paz interna o personal es más que deseable... es necesaria. Ella es un reflejo de la paz social que, a su vez, tiene su origen en el interior de las personas que la integran. Un círculo virtuoso que nunca deberíamos olvidar."
Yo sólo anoto que el círculo de la paz interior-paz social debe evitar ser un círculo de pasividad (cosa propia de los conservadores, que en su exageración: es propio de los fascismos). Paz interior también es felicidad, libertad, emancipación, lo cual da dinamismo a la existencia y evidentemente: cierto grado de conflictividad en la dialéctica de los deseos encontrados, que lleva a soluciones integradoras de mayor gozo estético.
Y si vamos al mundo empresarial: aquella empresa que sabe darle vida a la dialéctica de los deseos encontrados consta por ello de una Energía Vital extraordinaria para crear soluciones superiores y, por lo mismo, para dominar su ecosistema.     ....algo que nuestra consultoría ayuda a desarrollar.
(entrada tomada de mi blog en Staff)

El carácter de una nación está en su demos

Demos = Pueblo, eso se dice que significa en griego.    ...pero ¿se aplica?
La verdad es que "el pueblo" da miedo a las cúpulas, de ahí su demonización. En verdad, veamos, también es raíz de demonio, demiurgo, democracia, Demian, etc. 
El carácter de una nación está en su pueblo (Moro), es en el pueblo donde se encuentra una estructura cultural que canaliza su impulso. En el demos está el potencial de avance o retroceso de una Nación, es tonto no reconocerlo, es tonto atentar contra él.
Cuando las cúpulas han olvidado al demos como base de toda acción se genera una crisis, ese demos que representa también al inconsciente se vuelve contra quien lo denigra y es capaz de romper con ese "orden" que lo descalifica constantemente.
Lamentable que sea lo usual hoy en día. Lamentable que esos miembros de las clases acomodadas cuando ven a cualquier grupo organizado que con justicia protesta les gritan desde sus coches: "Pónganse a trabajar, bola de huevones". Lamentable descalificación contra esas personas que buscan lo justo. Las crisis provienen de la negación de la realidad, la realidad se impone y las estructuras se tambalean. Eso está pasando, dichosamente, hoy en día.

Han habido avances, pero aun falta mucho por hacer. Al mismo tiempo que las dinámicas emancipadoras se desarrollan las estructuras de violencia "legítima" crecen en su forma de contenerlas.
Mafalda sigue siendo muy actual (al menos en México), escuchando las noticias observa la opresión sobre el pueblo, le dicen que llevamos "10 años de democracia",...   luego lee la definición de Democracia y no para de reír...    
...menos mal que pronto dejará de ser un disparate.

En la medida en que se atenta contra las bases se está a su vez atentando contra Gaia. No son las cúpulas las que salvarán a Gaia, es el demos que está más cerca de ella.


Parece que estamos llegando a los límites. El mundo puede estar a punto de cambiar, el pueblo está desatado gracias a muchas nuevas tecnologías...   en el twitter al momento miles de "ciudadanos de a pié" expresan su repudio a las aberraciones de quienes ostentan el poder y nadie los puede callar.


Miles de ciudadanos de a pie, miles en verdad que viven en los lugares más recónditos del país están tomando consciencia del engaño azul y se están dando cuenta de que "sí hay de otra". Hay esperanza, pero requiere compromiso con la Verdad.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Un alto en el camino a 2011

Hacer un alto en el camino, reflexionar sobre lo logrado y lo no logrado en este 2010, poder así plantearse nuevos horizontes para 2011.
Esa es la fuerza simbólica que implica el haberse ya dado ayer el solsticio de invierno: tras haber alcanzado su punto más al Sur, se da el inicio del recorrido del Sol hacia el Norte. Los noches crecían hasta ayer, seguirán iguales hasta el día 25, día en que las noches empezarán a acortarse. La "Luz" entonces empieza a tener mayor peso y nos puede significar un periodo de "renacimiento", es decir, la oportunidad de resignificar entonces nuestra existencia.
Para el arranque de 2009 escribí en este blog una entrada "Cabañuelas" con una sencilla, breve y profunda reflexión que no deja de tener gran actualidad para este momento. Sugiero su lectura en el sentido de ayudar en la siempre necesaria resignificación de la propia existencia.
Que estas reflexiones permitan arrancar el 2011 con un gran impulso de vida, energía vital, vitalidad creadora, en fin: que sea plena en quien me lee la fuerza esencial de su humanidad que busca enérgicamente su objeto...

domingo, 19 de diciembre de 2010

Hacia fin de año

El 2010 se está terminando y esto suscita varias oportunidades de reflexión. Estaré colocando algunas en estos días siempre en relación con la temática fundamental de este blog.
Por ahora sólo un pequeña cita que nos presenta viva la fuerza de la esperanza de alguien lleno de sabiduría:
"I'm an optimist. I think I will return to Tibet with a Chinese passport." -- The Dalai Lama, on China